Gracias a Yonkis descubrí el intenso Left 4 Dead, un juegazo que os aseguro que no defraudará a los amantes de los shooters más desquiciantes: no sólo hay toneladas de zombis a los que despanzurrar, también hay toques de originalidad al género (1, 2), como niñas-zombi que gimotean y te hacen bajar la guardia, zombis de fumadores empedernidos que explotan dejando una espesa nube de humo, cazadores que se lanzan sobre ti sin que te des cuenta, zombis que vomitan una nube tóxica...en fin, todo muy bonito... lo necesario para que por ese culito no quepa ni un alfiler.
La segunda parte promete ser mejor que la primera y, si no, echadle un vistazo al tráiler:
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