Montjüic es uno de esos lugares "marginados" de Barcelona, parece dejado de la mano del ayuntamiento (la suciedad y los gatos se amontonan por todos los rincones) y sólo los turistas se atreven a explorarlo. Pero para los que vivimos en Barcelona, la montaña ofrece la oportunidad de pasear por parajes tranquilos, alejados del ajetreo de la ciudad y también esconde rincones muy interesantes. Uno de ellos es el Mirador de l'Alcalde, que ofrece unas excelentes vistas de la ciudad, diferentes de las que estamos acostumbrados a ver.
El mirador fue inaugurado por el alcalde Josep Maria de Porcioles y, además de las vistas, ofrece un original suelo-collage, de cerámicas y trozos de vidrio, obra de Joan J.Tharrats.
Panorámica con el puerto en primer plano
El funicular es una buena forma de llegar a Montjüic
En la adyacente Plaça de la Sardana podemos ver el monumento a la ídem
Y ya en el puerto, una foto de regalo del emblemático edificio Colón
1 comentario:
hola Ivan!!!
soy Carmen del blog de calleja, muchas gracias por comentar!!y sobretodo por darme animos en mi desafio ya que no las tengo todas conmigo...aunque ahi sigo!!! je je
por cierto felicidades por tu blog es muy interesante, ya tienes una fan.
un saludo
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